Por Sandro Pozzi, diario El Pais.
No fue por casualidad que Reed Hastings compartiera mesa con Barack Obama en la cena que la semana pasada ofreció a los titanes de Silicon Valley. Basta con mirar la progresión de la empresa que capitanea, Netflix. Con su forma de distribuir contenidos, el videoclub digital está revolucionando la forma en la que se consume televisión. Pero hay competidores que no tuvieron cubierto en la cena con el presidente y que tienen hambre.
Netflix es una de las niñas mimadas de Wall Street, de eso no hay duda. Hace un año, los títulos de la compañía se pagaban en torno a los 60 dólares. Ahora valen cuatro veces más. Un repunte que le permitió entrar por la puerta grande en el club que Standard & Poor’s reserva a las 500 mayores compañías de Estados Unidos, desplazando nada menos que al grupo editor del diario The New York Times.Netflix es el rey indiscutible del negocio del alquiler de película…